El Pastor René Pereira Jr, ministra la Iglesia Bíblica Emmanuel, en la ciudad de Santa Isabel, Puerto Rico, y dirige el programa radial Fe y Crisis, en el cual comenta temas de actualidad desde una perspectiva cristiana.
En estos días donde se ha levantado todo un revuelo, protestas y marchas en contra del abuso y los prejuicios raciales, no han faltado los que exigen que todo monumento y estatua que conmemora al navegante y explorador Cristobal Colón, sea eliminado y removido. La idea es que se le atribuye a este personaje histórico el abuso y genocidio contra miles de indígenas en el nuevo mundo. Sin embargo esta alegación carece totalmente de fundamento histórico.
No existe evidencia en las crónicas y relatos históricos existentes que confirmen que el navegante y explorador genovés haya promovido o haya incurrido en violencia y abuso contra los indígenas en las tierras descubiertas. El propio Fray Bartolomé de las Casas, quien fue un defensor y protector de los indígenas, y que escribió unas crónicas sobre lo sucedido con los indígenas, fue claro en que Colón nunca fue parte de ese abuso. La historia nos confirma que Colón procuró hacer amistad y tener buenas relaciones con los indígenas. La antropóloga y profesora de la Universidad de Stanford, Carol Delaney, confirma en su análisis que no fue Colón sino los conquistadores que vinieron después de él quienes cometieron terribles abusos contra los pobladores del nuevo mundo.
¿Vamos a pretender borrar la historia?

Si vamos a ser fieles a la verdad histórica, quien fue responsable en Puerto Rico de terribles abusos contra nuestros antepasados indígenas, fue bajo el mandato del conquistador Juan Ponce de León, quien de hecho, fue el primer gobernador de la isla. Bajo su gobierno se desató un levantamiento de los indígenas en el 1511 que fue sofocado brutalmente por los españoles. Fue bajo su gobierno que se establecieron las llamadas “encomendaciones” donde se repartieron indígenas a españoles para usarlos como esclavos en la extracción de oro de nuestra isla.
En lugar de destruir o eliminar las estatuas del navegante Cristobal Colón, debería eliminarse el nombre de la ciudad de Ponce, que lleva el nombre de este conquistador. También eliminarse el nombre de la avenida Ponce de León y otros lugares, escuelas y calles que llevan este nombre.
Pero la realidad es que todo esto es un absurdo. Jorge Washington tuvo esclavos bajo su mando. Igual Thomas Jefferson y otros. Hay quienes desearían borrar y reescribir la historia. No podemos juzgar los hechos del pasado utilizando la mentalidad y los criterios del presente. También es importante ir a los datos históricos y no recurrir a mitos e ideas que de repente algunos pretenden imponer. Cristobal Colón hizo una importante aportación a la historia de la humanidad y sus acciones dejaron una huella importante. Pero era un ser humano imperfecto con la mentalidad típica de un hombre de su tiempo, aunque bastante adelantado en muchos aspectos a sus contemporáneos.
La historia no está para cambiarla sino para aprender de ella y no volver a cometer los mismos errores.
PASTOR RENÉ PEREIRA Jr.
Iglesia Bíblica Emmanuel, Santa Isabel, Puerto Rico.